6 consejos para una mejor noche de sueño
Coma bien y mantenga una rutina de ejercicio saludable: comer una dieta saludable y hacer mucho ejercicio mantiene nuestro peso bajo control, pero también ayuda a dormir. Comer alimentos ricos en carbohidratos inunda los músculos con glucosa, causando movimientos musculares involuntarios durante el sueño, lo que interrumpe el descanso. Hacer ejercicio demasiado cerca de la hora de acostarse aumenta el metabolismo y la temperatura corporal y puede dificultar conciliar el sueño. Si tiene hambre antes de acostarse, pruebe a comer una mano llena de nueces. Los frutos secos proporcionan proteínas y grasas, que no solo son satisfactorias, sino que se digieren lentamente, lo que puede proporcionar un sueño tranquilo y rico en magnesio, un mineral que ayuda a calmar el sistema nervioso.
Mantener un ritmo: trate de mantener un horario regular de sueño, irse a la cama al mismo tiempo y levantarse al mismo tiempo. Crear este ritmo ayuda a regular el reloj interno de su cuerpo y puede ayudarlo a dormir mejor.
Simplemente diga no al alcohol, la cafeína, la nicotina y la electrónica: todo esto puede hacer que dormir sea difícil. No beba alcohol o bebidas con cafeína demasiado cerca de la hora de acostarse. Retire todos los aparatos electrónicos del dormitorio, incluidos televisores, computadoras y otros dispositivos electrónicos. Trate de evitar la luz brillante al menos una hora antes de irse a la cama. La oscuridad ayudará a que su cuerpo comience a producir melatonina, una hormona que regula naturalmente el sueño. Para ayudar a mantener su reloj interno en equilibrio, asegúrese de exponerse a la luz del sol en la mañana, lo que naturalmente le dice a su cuerpo que se despierte.
Manténgase fresco: asegúrese de que su habitación tenga un ambiente tranquilo, oscuro y relajante, que no sea ni demasiado caliente ni demasiado frío. Su cama y almohadas deben ser de apoyo, pero cómodas. Si experimenta dolor de hombro, cadera o espalda en la mañana, puede estar seguro de que no descansó tan bien como pudo. Puede ser hora de nueva ropa de cama.
Relajarse: su cuerpo necesita tiempo para cambiar al modo de dormir, por lo que debe pasar la última hora antes de acostarse haciendo una actividad de calma, como leer o tomar un baño caliente. Ciertas bebidas, como el té de manzanilla, pueden ser relajantes y no estimulantes.
Use aceites esenciales calmantes: los aceites esenciales como la lavanda y la bergamota son ricos en linalool y acetato de linalilo, compuestos que tienen propiedades relajantes bien conocidas.
Estos aceites se pueden difundir aromáticamente en el dormitorio para crear un ambiente tranquilo y apacible, perfecto para dormir bien por la noche. También pueden usarse por vía tópica y tomarse internamente para calmar el sistema nervioso, promover la relajación y llevar a un sueño reparador. Intente colocar de dos a cuatro gotas de aceite esencial de lavanda o bergamota en un té de hierbas tibio (manzanilla, hierba de limón, etc.) u otra bebida sin cafeína favorita, unos 30 minutos antes de irse a la cama, o agregue de dos a cuatro gotas de lavanda en una Vaciar la cápsula y tragarla unos 30 minutos antes de acostarse.
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